martes, 31 de mayo de 2011

Patagonian Expedition Race

Ahí pongo un video que he encontrado en Facebook sobre una carrera de resistencia en la Patagonia. Se trata de una competición que combina trekking, mountain bike, kayak y descenso con cuerdas durante 8 días en la patagonia chilena. Me ha gustado mucho el video promocional.



lunes, 30 de mayo de 2011

Ultramarathon man

Hace unos días terminé el libro de Dean Karnazes, "Ultramarathon Man". Aunque lo leí en inglés me transmitió desde el primer momento unas sensaciones increíbles de motivación y superación. Karnazes (o Karno como lo llaman en USA) es un ultramaratoniano extremo. La palabra ultramaratoniano ya es extrema de por si, pero en este caso hay que añadir de nuevo el adjetivo porque Karno es posiblemente la persona de este planeta que más distancia ha hecho corriendo de una sola tirada.

Recorriendo la Western States, carrera de 100 millas por la Sierra Nevada de California, el primer maratón de la Antártida o la Badwater Ultramarathon que es una carrera de 135 millas por el Valle de la Muerte de California con más de 50 grados durante el día, Karno nos impulsa a correr por divertirnos y por llevar nuestro cuerpo y sobre todo nuestra mente un poco más allá cada día. En ningún momento nos transmite prepotencia o superioridad.

Curiosamente aunque hablamos de una persona que recorre 200 millas (unos 320 km) de forma continua, el libro motiva a cualquier corredor que acabe de empezar a correr por los alrededores de su casa y seguir después con una carrera de 5 km, y el mes siguiente con una de 10, y así hasta el fin. La forma de narrar como empezó de nuevo a correr después de muchos años de excesos demuestra que cualquier persona que se lo proponga puede volver a practicar deporte. Un libro muy recomendable que también lo tenéis en español.

domingo, 22 de mayo de 2011

Reto Oxigeno Gore-Tex TransalpineRun

Ayer asistí como participante al reto organizado por la Revista Oxígeno para buscar dos corredores para la Gore-Tex TransalpineRun, una de las carreras de montaña más duras de Europa que se celebrará del 03 al 10 de septiembre de 2011 entre las localidades de Obertsdorf (Alemania) y Latsch (Italia) cruzando Austria y parte de Suiza. La edición de este año consta de 8 etapas para un total de 230 km y con un recorrido bastante técnico.

Comenzamos la jornada en la Casa Rural Peña Pintada en Cercedilla a las 9.30 de la mañana donde nos recibe el equipo de la revista Oxígeno casi en su totalidad así como los anfitriones de la casa rural. Por cierto, esta casa rural es un lugar impresionante para pasar un fin de semana en la Sierra, muy recomendable.

Nos dimos cita 22 participantes y ya desde un principio vi bastante nivel entre mis compañeros. Es cierto que nos habían dicho que los criterios finales de elección no iban a ser ni la velocidad ni el puesto de llegada, pero aún así ya veía que iba a tener bastante difícil estar al nivel de mis compañeros. Nos dijeron que hubo un total de 250 solicitudes para los 22 candidatos finales cosa que me hace sentir bien al estar seleccionado por delante de verdaderos corredores de montaña.

Después de estirar con Domingo, experto en fitness y alimentación de la revista, salimos hacia nuestra ruta de 19 km subiendo desde Cercedilla al puerto de Navacerrada por el Mirador de Rosales, el Reloj de Sol de Cela a través del Camino de la Pata de Cabra, Peña Hueca, Cerro del Telégrafo para alcanzar la estación de tren de Navacerrada donde tenemos el punto de avituallamiento en el kilómetro 12. Desde ese punto bajamos hasta el Polideportivo de Cerdedilla donde termina la aventura. La prueba se me hizo muy dura porque era una de mis primeras experiencias en el Trail de montaña pero aún así la terminé en bastantes buenas condiciones para lo que había sufrido en los primeros kilómetros. En todo momento la organización estuvo pendiente de todos los participantes y conmigo se quedaron Elena y Juan a la cola del pelotón. Después estuve bajando con los miembros del equipo Buff, Juanjo y Chemari, que se portaron fantásticamente conmigo. La verdad es que no tengo palabras para agradecer la ayuda de todos ellos. 

Después de esta primera experiencia de montaña me ha entrado un poco el gusanillo de este tipo de carreras, pero está claro que el entrenamiento de ciudad no tiene nada que ver con este tipo de travesías. Puedes ser capaz de hacer 40 kilómetros semanales pero acabar reventado en una carrera de estas. Ya veremos que pasa en los próximos meses, pero una cosa está clara: sin agobios ni prisas. 

viernes, 20 de mayo de 2011

Incredible India (II): Delhi

Seguimos con la crónica del viaje a India. El primer día llegamos a Delhi y nos sorprendió el bullicio y el movimiento de la ciudad. Hemos viajado bastante, relativamente hablando, pero casi siempre a países del primer mundo, de manera que Delhi nos impactó desde el primer momento.
El hotel tenía nombre de restaurante americano, Hotel Star Rocks, lo cual no auguraba un hotel muy lujoso, pero estando en India cualquier sitio es bueno. Efectivamente era un hotel bastante discreto, con algún mosquito en la habitación, pero que nos permitió dormir bien la noche que llegamos.

Desde que nos recoge la furgoneta por la mañana, hay varios factores que nos acompañarían durante el resto de viaje: miseria en todas las esquinas, caos circulatorio y claxón sonando todo el tiempo. De hecho en el primer semáforo había niños pidiendo como nunca hemos visto en España: suciedad y miseria de una forma brutal. Nos dirigimos al Qutb Minar, un magnífico ejemplo de arte islámico. Está dentro del complejo Qutb y tiene el alminar de ladrillos más alto del mundo con 72,5 metros. Una de las cosas que más nos sorprende es la cantidad de turistas indios que visitan los monumentos de Delhi. Si vas a Sevilla o a Madrid verás a un montón de "guiris" visitando la Catedral, el Alcazar o la Plaza Mayor y a pocos nacionales, pero en India (excepto en el Taj Mahal) es justo al contrario; el porcentaje de visitantes indios es mucho mayor que el de extranjeros.

En estos momentos del viaje estamos absorbiendo toda la información visual que nos llega: la gente, los puestos de refrescos "cagaléricos", los coches, los animales, en fin, un mundo totalmente diferente. Tampoco nosotros pasamos inadvertidos; la gente nos mira como si fuéramos marcianos.

Nuestro guía ya nos comenta la importancia de la religión en este país. En los siguientes días lo íremos comprobando más y más pero de forma somera hay que decir que para ellos Dios es prácticamente el que guía sus vidas. Desde los matrimonios hasta la circulación. Si no pasan más cosas es porque ellos mismos nos dicen que Dios está velando por ellos. A esto se une la cantidad de religiones presentes en el país. De hecho nuestra siguiente visita es el Templo de Flor de Loto, construido por los miembros de la religión Bahai que tiene repartido varios templos por otras ciudades de otros países del mundo.


Emplazado en medio de un gran parque nos lo encontramos llenos de personas rezando y visitándolo. Es un edificio impactante y que recuerda muchísimo a la Ópera de Sidney.

Como es el día después de la llegada, estamos aún un poco cansados y al día siguiente llega el resto del grupo para ver lo que falta de Delhi, terminamos la jornada visitando los jardines de Lodi. Ya a esta hora, aproximadamente la una de la tarde, el sol que cae es de justicia y la temperatura debe estar en torno a 35ºC. Suerte que es la época seca porque este calor con humedad debe ser insoportable. El Lodi Gardens es un inmenso pulmón dentro de la contaminada Delhi con una superficie de 360.000 m2. Lleno de parejas jóvenes y de alguna familia ya que estamos en sábado, es un sitio bastante tranquilo para desconectar del tráfico que hemos sufrido en las horas anteriores.


Después de comer en sitio típico para turistas (increíble que de vez en cuando eche de menos el sabor de la comida india) con algo de arroz, pollo tandori y el fantástico pan Naan hecho con queso o ajo, nos volvemos para el hotel para acostarnos directamente a dormir el impacto y el efecto del viaje. 

domingo, 15 de mayo de 2011

100 km

Esta mañana me he levantado muy temprano para hacer con Miguel el reto que nos propusimos la semana pasada: 100 km. en bicicleta. Hemos quedado en el Ninot muy cerca del comienzo del carril bici de Colmenar Viejo donde los fines de semana te puedes cruzar con decenas de ciclistas. Hoy no era la excepción ya que el día ha amanecido sin una nube aunque todo hacía pensar que tras la tormenta de ayer tendríamos más dificultades.

Los primeros kilómetros han costado; teníamos las piernas pesadas y sabíamos que en 100 km teníamos que dosificar las fuerzas. Así que hemos hecho el primer tramo de casi 33 km. en una hora y cuarenta y cinco minutos a un ritmo de 17 km/h. En Soto del Rey se acaba el carril así que nos hemos "sentado" a deliberar acerca de que ruta seguir con un Aquarius y un café.

La primera intentona ha sido tirar hacia Guadalix de la Sierra pero parecía bastante duro, después Miraflores y aún parecía más duro, así que hemos tirado hacia el precioso pueblo de Manzanares el Real. 6 km. más hasta Manzanares y un par de ellos más hasta el comienzo de la Pedriza, donde hemos hecho el tentempié de la mitad del recorrido, un bocata de tortilla que estaba bastante rico, por cierto.  
Las piernas todavía bastante bien y la vista de la Pedriza maravillosa. Hemos encontrado muchos caminantes preparándose para andar algunos kilómetros por la sierra.

Con fuerzas casi intactas hemos salido de la Pedriza de nuevo hacia Madrid. Habíamos subido unos 300 metros desde la salida y nos daba más confianza en que la vuelta iba a ser algo más suave. Al pasar por Manzanares el Real me he apuntado una visita para el futuro con Miryam. Parece un pueblo muy cuco y con algunos sitios muy interesantes para venir a comer. Será uno de los destinos de fin de semana de los próximos meses.
De nuevo al entrar en el carril bici en Soto del Rey nos hemos encontrado con energía aunque el sol ya pegaba a esa hora con bastante intensidad. La crema solar ha sido escasa esta mañana y ya nos veíamos esta tarde con el moreno "albañil"; gajes del oficio. Me impresiona el carril bici de Colmenar porque puedes ver grupetas de ciclistas a una ritmo de 40 km/h e incluso algún ciclista en posición de triatlón a más de 50 km/h. Me he enganchado a alguno de ellos y he marcado 47,6 km/h de punta. ¡Impresionante el ritmo que llevan algunos!
Después de los 100 km, como no, hemos terminado la jornada con una caña al lado de casa, merecida totalmente después del esfuerzo del día, 
  

jueves, 12 de mayo de 2011

El Cenador de Salvador

Homenaje por todo lo alto el pasado domingo con Miguel, Carmen y el pequeño Iván. Nos fuimos al bonito pueblo de Moralzarzal para comer en el Cenador de Salvador, restaurante de una estrella Michelin y dirigido por Salvador Gallego. Como somos como somos nos pedimos el menú degustación con nueve platos y dos vinos y a disfrutarlo.

El edificio está bastante escondido y desde el exterior no da la apariencia de calidad que sí te ofrece cuando entras. Decoración demasiado clásica tanto en la arquitectura como en el mobiliario y mesas decoradas con mucho gusto aunque sin modernidad. Entre los nueve platos entrantes con mini-croquetas de ave, un curioso gazpacho de fresa o un cochinillo que, en mi opinión, fue lo mejor de la comida. La calidad de la comida bastante buena y la cantidad justa para el número de platos.

Como aspecto mejorable la falta de información clara sobre los vinos y la no posibilidad de maridaje, aspecto bastante importante para un restaurante de una estrella Michelín.


sábado, 7 de mayo de 2011

Nuevas zapatillas

Me han llegado las nuevas zapatillas que compré por Internet. Reconozco que soy un pijotero o un friki o como queráis llamarme, pero soy el objetivo fácil del marketing por Internet. Me mandaron una invitación para poner colores a unas Nike y al final me las vendieron. Como digo soy muy fácil.

Aunque tengo un peso considerable, después de hablar con un amigo que además de ser médico de profesión lleva bastante tiempo corriendo, me decidí a comprar las Nike Free Run. Es un concepto de zapatillas que reproducen de forma bastante fiel el correr descalzo, o lo que los anglosajones llaman "Barefoot running".



Ya en los JJOO de Roma en 1960 Abebe Bikila ganó la prueba de maratón con un tiempo de 2h 15' corriendo descalzo. Tampoco es nuevo que muchos de los atletas africanos entrenan descalzos, seguramente porque ni siquiera pueden permitirse unas zapatillas de correr. La cuestión es que se ha abierto un debate sobre si correr descalzo es bueno o no para evitar lesiones; y como pasa con todo en nuestra sociedad actual hay dos vertientes que defienden a capa y espada las virtudes de una y otra cosa. Por eso me he decidido a probar. Lo que sí está claro es que no se pueden correr 10 km el primer día que te calzas estas zapatillas como tampoco es bueno correr esa distancia descalzo por la arena el primer día que vas a la playa.

Si te pones a mirar por Internet te puedes volver literalmente "majara" porque hay desde grupos de corredores que han organizado el primer "International Barefoot Running Day" hasta colectivos que te dicen que si te pones a correr descalzo te vas a quedar sin rodillas, tobillos y dedos del pie. Lo dicho, hoy en día todo el mundo opina de cualquier asunto con una tranquilidad aplastante.

Por mi parte voy a probar con estas zapatillas y empezaré a correr con ellas tranquilamente 20' el primer día y aumentando poco a poco la distancia. Ya os iré comentando mis impresiones en las próximas semanas. Os dejo un par de páginas donde podéis leer un poco más sobre el "barefoot" running:
http://shodless.com/
http://jmdomenech.blogspot.com/

lunes, 2 de mayo de 2011

Incredible India (I)

Empiezo el relato por fascículos de nuestro viaje a la India. Un viaje impresionante como leeréis en los próximos días. El slogan del turismo de India es "Incredible India" (increíble India), y no les falta razón.

15.de Abril.- 04.00h. Empieza el viaje cuando suena el despertador. El taxi viene a recogernos en media hora. El avión hacia Bruselas sale a las 06.40 y es mejor estar con tiempo en el aeropuerto. Madrid-Bruselas-Delhi con una hora de conexión en Bélgica. Parece justo y de hecho lo es.
Primero sorpresa al llegar, hay overbooking en las reservas pero al ver que vamos a Delhi nos dan prioridad y nos embarcan en lo que llaman Business, lo que en un B737 no es más que una separación de los asientos de adelante y los de atrás. Aún así nos dan un desayuno durante el vuelo, algo es algo. El vuelo sale con 30 minutos de retraso, tal y como cuando fuimos a Japón en 2008. Ya sabíamos que nos tocaría correr en el aeropuerto de Bruselas, pero no pensamos que tanto.

Efectivamente llegamos a Bruselas y salimos pitando hacia la otra terminal. Hay países que se hacen más odiosos que otros y es cierto que no tengo argumentos objetivos para decirlo pero es que la actitud de algún trabajador del aeropuerto casi nos hace perder el avión a Delhi. No nos dejaban pasar por una entrada de urgencia y tuvimos que hacer varios minutos de una cola interminable. Al final nos dejaron pasar por una entrada prioritaria que más que un control de pasaportes parecía la salida de una carrera popular. Dijo esto porque eramos como 25 personas las que íbamos desde Madrid a Delhi y salimos todos corriendo como si nos fuera la vida en ello.

Llegamos sudando y a 150 pulsaciones al mostrador de embarque. Allí nos tranquilizaron después de vernos sudando como pollos y de avisar que venían varios pasajeros corriendo por la terminal. El avíón era un A330 de Jet Airways. Nunca habíamos volado en esta compañía y tengo que admitir que, sin estar a la altura de otras como JAL, está a un nivel muy alto de servicio.  Nos habían hablado muy bien de ella y estuvo a la altura.

En el avión tuvimos el primer contacto con la comida india (se debe decir india y no hindu, ya que esta palabra hace referencia a la religión Hinduista) Picante, por supuesto, que esperábamos. Pollo y arroz. Menta y azucar después de la comida para suavizar el estómago. Nos comimos lo justo para ir tomando contacto poco a poco; no era cuestión de tener diarrea el primer día.

El vuelo fue muy, muy tranquilo. Prácticamente sin turbulencias y el tiempo de vuelo no especialmente largo (7,40 horas) Quizás cruzamos más de 10 países (Croacia, Bulgaria, Turquia, Irán, Irak, Afganistan, etc...) una pena que no estuviéramos en ventanilla. De todas formas encontramos entretenimiento porque teníamos al menos diez películas de estreno (El discurso del Rey, Harry Potter y las Reliquias de la muerte, 127 horas, ...) así que manos a la obra nos pusimos a ver cine.

Entre películas, comida y tetris aterrizamos en Delhi a las 22.40 hora local (19.10 hora española) y ahí nos encontramos la última de las sorpresas del viaje: nos habían perdido las maletas a todos los que volamos desde Madrid. Nos confirmaron que las maletas se habían quedado en Bruselas porque no había dado tiempo a hacer el transfer así que hicimos nuestra pertinente reclamación y salimos a que nos recogieran para llevarnos al hotel. Para ser positivos y viendo el vaso medio lleno, India es el sitio más apropiado para que te pierdan la maleta. Como veríamos en los próximos días no hay ningún problema en llevar la misma ropa durante varios días en este país; lamentablemente más del 50% de la población va más sucio que tú.

Aunque ya íbamos cansados, el tráfico nocturno de la ciudad de Delhi nos dejó una sensación como de comic. Ese tráfico no era normal. "Estamos cansados", pensamos, es por eso que nos parece todo muy caótico. ¡Qué equivocados estábamos! El resto del viaje no sería suficiente para acostumbrarnos al tráfico de la India. Pero eso será en otro capítulo.