jueves, 30 de enero de 2014

Cambalache

Cambalache es un tango escrito en 1934 por Enrique Santos Discépolo y que he escuchado cantar a Serrat en algunos de sus conciertos. Hace referencia al siglo veinte y a la falta de valores que ya en esos años del siglo pasado había. Me ha gustado compartirlo con vosotros porque sigue reflejando perfectamente lo que ocurre en estos días en nuestro país, lleno de chorizos y sinvergüenzas.


Que el mundo fue y será una porquería

ya lo sé...
(¡En el quinientos seis
y en el dos mil también!).
Que siempre ha habido chorros,
maquiavelos y estafaos,
contentos y amargaos,
valores y dublé...
Pero que el siglo veinte
es un despliegue
de maldá insolente,
ya no hay quien lo niegue.
Vivimos revolcaos
en un merengue
y en un mismo lodo
todos manoseaos...

¡Hoy resulta que es lo mismo
ser derecho que traidor!...
¡Ignorante, sabio o chorro,
generoso o estafador!
¡Todo es igual!
¡Nada es mejor!
¡Lo mismo un burro
que un gran profesor!
No hay aplazaos
ni escalafón,
los inmorales
nos han igualao.
Si uno vive en la impostura
y otro roba en su ambición,
¡da lo mismo que sea cura,
colchonero, rey de bastos,
caradura o polizón!...

¡Qué falta de respeto, qué atropello
a la razón!
¡Cualquiera es un señor!
¡Cualquiera es un ladrón!
Mezclao con Stavisky va Don Bosco
y "La Mignón",
Don Chicho y Napoleón,
Carnera y San Martín...
Igual que en la vidriera irrespetuosa
de los cambalaches
se ha mezclao la vida,
y herida por un sable sin remaches
ves llorar la Biblia
contra un calefón...

¡Siglo veinte, cambalache
problemático y febril!...
El que no llora no mama
y el que no afana es un gil!
¡Dale nomás!
¡Dale que va!
¡Que allá en el horno
nos vamo a encontrar!
¡No pienses más,
sentate a un lao,
que a nadie importa
si naciste honrao!
Es lo mismo el que labura
noche y día como un buey,
que el que vive de los otros,
que el que mata, que el que cura
o está fuera de la ley...

sábado, 18 de enero de 2014

Como pasan los dias

Sin darnos casi cuenta estamos a 18 de enero y el año se encamina a otra carrera de fondo pero a velocidad de keniatas. Me acuerdo perfectamente volando de nuevo hacia Dubai tras las vacaciones de Navidad y el pensamiento o idea de tener que escribir de nuevo este blog con cierta regularidad. Eso fue el 5 de enero y ya han pasado otras dos semanas y no he encontrado ni un solo hueco para escribir al menos unas pocas lineas de bienvenida al año.

Un año que vendrá marcado si Dios quiere (insha'Allah que se dice por estos lares) por la llegada de una pequeña criaturita que marcara nuestras vidas para bien y para siempre. Ni que decir tiene que lo llevamos esperando con los brazos abiertos desde que lo supimos.

Intentaremos de nuevo ponernos en forma como ya hice algunos meses atrás corriendo de forma constante y comiendo algo mejor, pero sin presión o agobios. No voy a batir ningún record de maratón a mi edad y mi estado físico, pero quiero volver a disfrutar de las carreras y los entrenamientos.

Disfrutaremos la experiencia de vivir en el extranjero por tercer año e intentaremos disfrutar como hasta ahora hemos hecho. Los viajes se harán de otra forma y con otra logística pero serán igualmente interesantes y reconfortantes.

En conclusión, vivamos este 2014 con las mismas ganas que los anteriores y de alguna forma obtendremos la recompensa.