Chinchón

Ayer visité por primera vez Chinchón. Nunca había estado en este pueblecito, uno de los más bonitos de la Comunidad de Madrid y eso que llevo ya en Madrid casi 7 años. Ayer era un hervidero de gente por el fantástico día que hacía en Madrid y cuando eso pasa todos los de la capital (o los que vivimos en ella) salimos "escopetados" para el campo y para comer con los amigos. Aunque la plaza del pueblo es la parte más conocida toda la ciudad me pareció encantadora; callejuelas imposibles, pendientes por todos sitios y un bonito castillo coronando el lugar. Merece la pena la visita.

Quedamos con nuestros amigos Miguel y Carmen y una vez allí nos encontramos a otros amigos de ellos. Ayer era día de cervecita al sol y eso es lo que hicimos en el momento que encontramos una mesa libre. Esos momentos son únicos: charla tranquila sobre cualquier tema con una caña/clara en la mano y unos frutos secos. Momentos para guardar en la retina durante mucho tiempo. Miguel había reservado, siguiendo su olfato de sibarita para estas cosas, en la "Casa del Pregonero", en plena plaza de Chinchón. Y lógicamente, y para no faltar a su conocimiento y sabiduría en estas lides, no pudimos comer mejor. Al final nos encontramos   algunos con un Gintonic y otros con un ron Zacapa charlando hasta las siete de la tarde. ¡¡¡Gracias amigos!!!